En la provincia de Pastaza, Santiago Molina alcanza la primera horqueta de un imponente Ficus, a unos 35 metros de altura. La altura de estos árboles se acerca a los 50 metros de altura, pero no es necesario llegar tan alto para disfrutar de la extensa Amazonía. o del estero que discurre abajo uniendo una laguna de várzea con el río Capahuari. |
Al subir árboles hay factores que pueden poner en peligro al escalador, y que no se presentan durante una tradicional escalada en roca. En los árboles vive un sinnúmero de especies “peligrosas” como avispas, culebras y tarántulas, que pueden reaccionar defensivamente al vernos entrar en su casa sin haber pedido permiso. Un escalador de árboles deberá tomar precauciones ante encuentros de esta naturaleza. Asimismo, se debe poner a punto el equipo de escalada, que es básicamente el mismo que se utiliza en montaña. Arneses, ascensores (jumars), descensores (gri gri, ocho), cintas y la creatividad son indispensables para realizar esta actividad con plenitud y seguridad. Si se domina a la perfección el equipo de escalada, cualquier árbol será una frontera alcanzable.
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